revolucionando(me)

Voy a hacer la revolución. A chillar todo lo que pienso en voz alta. Me voy a volver loca. Y no voy a parar , ahora ya no voy a parar. Porque me da igual, no pienso seguir viviendo con la cabeza agachada, con la espalda cargada. No voy a aguantar mas mentiras ni mas gritos, no voy a dejar que lo arruines una vez mas. Y no voy a dejarlo, porque ahora soy fuerte, ahora siento que puedo. Y debo. Estoy harta de tus discursos y de tus berridos. Estoy harta de que me digas lo que tengo que hacer. Y no puedo mas. Esto no puede seguir así.. Yo voy a romper ventanas…

silencio . . .

A veces no tengo nada que decir. Me quedo sin palabras. De repente, se hace el silencio. En un segundo se acaba todo, y me muero, me muero y no puedo remediarlo. Es como quedarse sin pilas, batería baja o sin gasolina. Simplemente no hay energía ni ganas para mas. Es un punto muerto vital . Y lo necesito, porque ya no puedo más, todo es demasiado difícil. Me he pasado toda la vida circulando por carreteras vacías, con lluvia, frío y demás obstáculos, pero ahora, ahora he decidido hacer un parón, dejarlo estar, poner las luces enmedio del camino y desaparecer en la niebla...

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Voy a escuchar esa canción mil veces. Y a beberme las palabras mientras pienso que me gustaría decírtelas. Voy a pensarte muy fuerte, muy adentro. Hasta sangrar. Y te voy a tener corriendo por todas mis venas, invadiéndome. Convirtiéndome en débil, yo que presumo de ser fuerte, de no sufrir. Y sabes que miento cuando te digo que no siento, que no tengo nada adentro. Sabes que soy cobarde y miento porque no puedo admitirlo. No puedo admitir que te quiero, y que si no vuelves, me muero..

tiempo . . .

Me asombra la lentitud del tiempo. Que un minuto sean sesenta segundos. Y que una hora sean sesenta minutos. Que los días duren 24 horas y los meses, 30 días. Que los años tengan 365 días. Que en una vida se tenga tanto tiempo para volver a empezar. Que nos capture la rutina. Que la eternidad no sea para siempre. Y que prometamos un tiempo que no tendremos. Que todo pase deprisa cuando quieres ir despacio y que vaya despacio cuando quieres ir muy deprisa. Me sorprende ver que estamos a mitad de julio. Y verte reír, verte reír mientras yo intento estresar el reloj o atrasarlo según el día. Porque quiero tener mas tiempo para estar contigo y menos para estar sin ti… Ya sabes que yo soy muy bruja..y que cuando me propongo algo, lo consigo…

esperar . . .

Tenía las manos rotas de tanto trabajar. De las comisuras de sus labios colgaba una sonrisa rota, estropeada de tanto llorar. Tenía los ojos mas tristes del mundo, tanto que los que la conocían decían que había enloquecido de tanta tristeza, que no hablaba, que los veranos le resbalaban en la nuca y los inviernos le helaban los pies. Y que tenía el corazón negro, podrido, roto, maltrecho y ajado. Que se había cansado de esperar. Que se dio a la bebida y a la mala vida cuando la mala suerte empezó a perseguirla. Que se perdió en todos los bares posibles y se ahogó en el fondo de todas las copas. Y que un día se cansó, se cansó y se sentó a esperar en una silla de aquella plaza a ver si le cambiaba la vida . . .

huir . . .

Podrías pasarte la vida huyendo. Huir, sin más. Correr hacia ninguna parte. Buscar el desvío con desesperación. Y esconderte, esconderte de todo y de todos, negarte a reconocer eso que te duele todos los días. Y convertirlo en tu opción, en tu salida, vivir por y para ello, como siempre. Dejar escapar tu vida como si fuera un reloj de arena.Pero sabes que no sería eterno, que todo acaba volviendo y que te acabarían encontrando..

tormenta emocional .

La lluvia cae lentamente golpeando los cristales, y en el reproductor suenan canciones tristes. Y la chica pequeña está sentada en su silla. Con el pijama a rayas y las zapatillas de colores, con el pelo en lo alto de la cabeza. Es pequeña pequeñita,tanto,que un día se hizo invisible. Y ya nadie la vio nunca más. Pero hoy no va a estar triste.Hoy no se va a rendir, porque ella nunca va a dejar de sentir, de tener ese corazón tan rojo, ella nunca va a dejar de vivir.

contorsionismo.

Me monto, me desmonto. Me parto y me junto. Doy la vuelta y miro hacia atrás. Y giro.. giro mil y una veces a ver si se cumple la magia, a ver si funciona el hechizo. Pero nunca se cumple porque la magia no existe y yo siempre me caigo y me doblo y me rompo y entonces no sé como reconstruirme..

heroína ...

La heroína era su única vida. Al principio se pinchaba solo para divertirse, para cogerse un buen colocón , para subirse al séptimo cielo. Pero nadie le había dicho cuanto iba a disfrutar la heroína, nadie le había dicho que era un viaje sin vuelta atrás. Y poco a poco la droga la fue chupando cada vez mas y mas. Se la fue llevando lentamente. Y cada vez había menos. Adelgazó, sus brazos escuálidos llevaban el rastro de miles de pinchazos y sus mejillas ya no tenían vida. Sus ojos eran como pozos sin fondo, tan vacíos… Y ya no tenía nada mas. Vivía por y para pincharse. Necesitaba sentir esa adrenalina corriendo por sus venas. Acallar el ruido de su cabeza con la sensación. Y una noche de esas en que no podía dormir sintió la ansiedad mas fuerte que nunca… la necesitaba.. y salió a la calle presa de una locura ciega, corriendo, sin pensar… y horas después la encontraron en aquel callejón sin salida con la aguja aún clavada en el brazo…

no soporto . . .

No soporto el romanticismo. Enamorarme y que mis propias teorías me den la razón. Perder la calma por las cosas que quiero y no encontrar el equilibrio. Acercarme al borde del precipicio, darte un beso sin pensar. No soporto verte en todas las lunas, supeditar mi corazón al tuyo y crear una nueva filial del amor. Odio que me digas que no cuando es sí, y que me llames princesa cuando pretendes destronarme. . .

9 años después...

Porque fue el verano de copperpot. Y no parábamos de cantar. Y fuimos las reinas del pop, la chica del vestido azul y todas las canciones que sonaban en el viejo radio CD de la salita. Y tú me dejabas tu CD para que me hiciera compañía por las noches en las que el ruido no me dejaba dormir. Y ese agosto en la torre, el último. Un adiós a la niñez. Y el verano siguiente, al reencontrarnos, ya no teníamos nada que decirnos. Se había ido la magia. Yo ya no te contaba al oído. Y no nos preguntábamos porque tenía tanta luz ese día tan sombrío.. Que fácil era… de verdad, que fácil era…. Yo te sigo echando de menos todos mis veranos...